Agua procedente directamente del manantial de Monchique con un PH de 9.5, está considerada el agua más alcalina del mundo en nacimiento. 

El consumo del agua de Monchique es la mejor forma de equilibrar de manera sencilla la alcalinidad de nuestro organismo. Esto a medio plazo se traduce en la prevención de casi todas las dolencias y enfermedades. 

El agua alcalina evita las fermentaciones productoras de toxinas  en nuestros intestinos asociadas a una mala o deficiente calidad de los alimentos,  favoreciendo la digestión de los alimentos y  neutralizando la hiperacidez gástrica

Tiene un efecto curativo en la indigestión, la diarrea crónica, las enfermedades del estómago e intestino y en el estreñimiento.

Al atravesar más fácilmente las paredes celulares favorece la alimentación de las células mejorando así su regeneración y buen funcionamiento.

Favorece la eliminación de sustancias residuales 

Combate la acidez orgánica ocasionada por dietas ácidas (excesivamente ricas en carne y productos refinados).

Si tenemos el organismo con un pH bajo (ácido) envejecemos de una forma mucho más rápida, ya que la actividad antioxidante se altera, retenemos líquidos, aumenta el riesgo de cálculos renales, crecen los hongos y bacterias por falta de defensas y para equilibrar esta deficiencia el organismo coge los minerales de los huesos debilitándolos.

Ideal para niños, ancianos, embarazadas y deportistas